Naranjas heladas, robadas, podridas y hasta con pesticidas se venden en tiendas de Valencia regentadas por asiáticos.

Naranjas de Valencia en mal estado.

Naranjas podridas en la capital mundial de los cítricos. Consumidores y agricultores valencianos han explotado y han decidido denunciar ante la Conselleria de Comercio las múltiples irregularidades detectadas en las naranjas que se venden en pequeñas tiendas de Valencia, sobre todo regentadas por extranjeros de origen asiático, indican.
Naranjas cogidas del suelo, heladas, robadas, con pesticidas, manchadas, sin calibre ni etiquetado y con irregularidades en los precios. Según los denunciantes la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA) y la Asociación Valenciana de Consumidores y Usuarios (Avacu), se incumplen “todas las normas de comercialización, calidad y ética”, lo que acaba arruinando a los labradores y a los comercios que sí cumplen, además de poner en riesgo, en última instancia, la salud del consumidor.
Esto es competencia desleal que pone en peligro a la población Los técnicos de AVA han inspeccionado y adquirido muestras en 24 tiendas de la capital valenciana, si bien aseguran que este fenómeno se produce en toda la Comunitat, ya que el número de tiendas irregulares es muy elevado. “Esto denigra la imagen de Valencia y de sus agricultores y va contra la salud de los consumidores. Estamos seguros que ya habrán producido más de un dolor de tripa o diarrea”, dijo el presidente de AVA, Cristóbal Aguado.
En su opinión, se está produciendo un “incumplimiento sistemático de toda la legalidad que pone en peligro la salud económica de todo el sector agrario valenciano y de las tiendas que sí cumplen”, ya que estas naranjas defectuosas “se venden a precios reventados para que el consumidor pique. A la tercera que pelan, tienen que tirar todas a la basura”, denuncia.
¿Quién les suministra?

Otro punto negro es la distribución. Aguado relata que a estos negocios “llegan furgonetas de personas que no parecen comerciantes, vacían los cajones, se llevan el dinero y se van”. El representante de Avacu, Fernando Móner, pidió que los controles no se limiten a visitas y se abran expedientes.
Medidas “serias” si no hay control

Si la Generalitat no empieza a sancionar de un modo ejemplar y a cerrar estos comercios, amenazan con acciones “más serias” ante un “fraude” que da “mala imagen de nuestro buque insignia en nuestra propia ciudad”, anunció Cristóbal Aguado. “Ya está bien. No queremos tener que comparecer otra vez para hablar de salud pública y seguridad alimentaria. Esto es competencia desleal que pone en peligro a la población”, alertó el presidente de Avacu, Fernando Móner