martes, 20 de marzo de 2012

PALMO A PALMO.

Pintan Bastos

¿Qué podemos esperar de un país donde se les busca excusas a aquellos que vienen a asaltar y a robar mientras que a las víctimas de los golpes y de las humillaciones se les carga con injustas calumnias y falsas acusaciones?

¿Que podemos esperar de un sistema en el cual un delincuente multi-reincidente en vez de estar bajo orden de expulsión puede tirarse viviendo en nuestro país los años que les plazcan sin ser molestado, gozando de una bochornosa impunidad y contando con la movilización de las múltiples asociaciones "ciudadanas" al caso?

¿Qué se puede pensar de un pueblo que, en vez de sentirse orgulloso por la resistencia que ofreció a lo largo de los siglos, hoy se muestra complaciente, aceptando mirar hacia abajo, y dándole poco valor a todo aquello por los que sus padres lucharon?

No hablamos de estar en peligro, hablamos de estar en una avanzada etapa de extinción; donde hemos pasado de un excesivo pesimismo al frio más absoluto de la renuncia declarada. España muere porque no cree en si misma. Hemos prescindido de nuestra fuerza por la comodidad del mero espectador, hemos perdido la capacidad de discernir en pro de nuestra propia supervivencia. Mucho me temo que algunos no saben siquiera que significa todo esto.

Por un lado, el neo-bárbaro en ávidas hordas sedientas de venganza, en el otro, ideólogos izquierdistas y liberales que ven en esta mixtura neo-tribalista y ultraviolenta la más deseada victoria contra el mundo occidental que dé paso a las cohortes de consumidores atomizados que no tengan más identidad que su poder adquisitivo.

Tragaremos golpes e insultos, luego iremos a refugiarnos tras nuestra puerta blindada viendo la “vida” pasar a través de facebook y los telediarios.

Después de todo basta con no estar en el lugar equivocado en el momento equivocado… De tener los medios para evitar los peores barrios… De no volver demasiado tarde… De no responder a los insultos y a los escupitajos…De no “provocar”… De ser discreto, de fingir no entender y no ver, de no ocuparse de los “problemas de otros”, de multiplicar nuestros signos de sumisión, de dejar que la chusma y la gentuza campen en las calles como les dé la real gana.

Esconderse, arrastrarse, huir, hacer trampas, olvidar, mentir…Todavía es posible escapar de todo eso, siempre nos quedara el “honor”, por supuesto,…ese viejo truco que no sirve para nada si no se pelea por lo que se quiere, palmo a palmo.

Fdo: Resistencia Alcantarilla.

No hay comentarios:

Publicar un comentario